El 2022 fue un año donde la tendencia continuó hacia las casas prefabricadas, tras el explosivo interés que causó este tipo de vivienda modular con el confinamiento, el teletrabajo y el éxodo de familias que prefirieron instalarse en lugares con más naturaleza y más amplios.
Al ser viviendas con diseños modernos, sostenibles, de fácil instalación, y en muchos casos, más económicas que las casas tradicionales, el foco apunta a que, por un año más, la tendencia del sector inmobiliario tendrá como protagonista este tipo de proyectos prefabricados.
En esta oportunidad, nos referimos a la casa Marseille, que tiene una superficie de 41,28 m2 con un diseño «Bora» con un exterior “no tradicional”, por un precio que no llega a los 13.000 euros (12.540 euros, precio oficial)
Según explica su fabricante, “visualmente, parece que la casa está hecha de dos partes separadas”. Esta ilusión óptica la crean las ventanas tipo loft y el techo split skillion, ya que uno de sus bordes inclinados es más alto que el otro.
Sin particiones de espacio
El diseño de esta casa es bastante universal. Casi no hay particiones en el espacio habitable lo que le da al propietario la posibilidad de diferenciar libremente las áreas.
Por ejemplo, esta vivienda puede ser tu oficina con cocina americana y un lugar para descansar. También existe la posibilidad de elegir un diseño de casa tradicional creando dormitorios y otras habitaciones.
En el plano estándar, solo el baño está separado con paredes. El interior de esta casa también es único debido a un techo alto y ventanas adicionales en el segundo piso de imitación.
Gran entrada de luz
Debido a la gran cantidad de ventanas, la vivienda recibe mucha luz natural, por lo que necesita menos iluminación artificial.
La superficie habitable total es de más de 32 m2, lo que es suficiente para alojar a dos o tres personas. Además, según sentencia el fabricante puede ser personalizada y “modificada” para todo tipo de cliente.
Fuente:Eleconomista