La firma internacional Maestro Casas construye hogares a precios económicos y con todas las prestaciones de una vivienda habitual
Casas prefabricadas de madera por poco más de 10.000 euros, esa es la propuesta residencial de Maestro Casas, una empresa que lleva fabricando viviendas en Europa desde 2008. idealista/news ha tenido la oportunidad de entrevistar a Adrián Martín García, técnico comercial de Maestro Casas.
Construcciones en madera a medida Maestro Casas S.L. inició su recorrido en 2008, pero su actividad no llegó a España hasta 2018. Desde entonces, han desarrollado numerosos proyectos y han creado un catálogo de casas prefabricadas de madera extenso a precios populares.
¿Cuánto cuesta una casa prefabricada de madera?
El precio de una vivienda prefabricada responde a numerosos factores. En el caso de la compañía multinacional Maestro Casas, el precio medio por m2 es de 700 euros para la estructura de vivienda de madera construida con aislamiento. “Electricidad, fontanería y baño por unos 7.000 euros y la licencia también por otros 7.000, aunque puede variar en función del tamaño”, apunta Adrián Martín.
“Otros pequeños servicios como pintura y amueblado no los ofrecemos aún por cuestiones logísticas. Durante los próximos años, queremos ofrecer viviendas lo más terminadas posible, manteniendo una muy competitiva relación calidad/precio”, añade.
En el catálogo de la empresa, se pueden encontrar casas que van desde menos de 8.000 euros, como el modelo Lena, de 31,79 m2, un dormitorio, baño y cocina, hasta los 82.250 euros del modelo Amazon, de 208 m2 y cuatro dormitorios.
¿Son sostenibles las casas prefabricadas de madera?
“Las viviendas prefabricadas unifamiliares nórdicas suponen la construcción escalable en volumen más sostenible disponible en este momento, ya que la estructura principal se puede resolver por completo con materiales naturales (madera, lana de roca y teja de cerámica)”, señala Adrián.
La madera con la que trabaja la empresa proviene de bosques gestionados sosteniblemente. Se considera una construcción seca que, junto al alto nivel de prefabricación, desemboca en tiempos de ejecución muy cortos.
“La mayor parte del trabajo queda hecha en el taller, lo cual beneficia no solo la ecología, sino también a la salud y la seguridad de los profesionales. Actualmente, la madera de mejor calidad/precio para construcción proviene del norte de Europa. Gracias a la absorción natural de dióxido de carbono de la madera y al reducidísimo consumo de su procesado, su huella negativa de carbono compensa la positiva de transportes, alcanzando la construcción con madera una huella de carbono neutra en la mayoría de los casos”, detalla Martín.
¿Cuánto dura una casa prefabricada de madera?
“La madera nórdica es un material único en su alta resistencia para su reducido peso. Es un material muy eficiente a nivel de durabilidad, aislamiento, ecología y economía. Fue de los primeros materiales de construcción del planeta y hay grandes construcciones de madera en el mundo que han durado siglos. Podemos decir que es un material que no destaca en ninguna propiedad concreta, pero que, en cambio, mantiene buenos niveles en todas ellas. Es el material más versátil para construcción, comenta Adrián Martín.
¿Se puede vivir en una casa de madera?
Muchas personas se preguntan si se puede residir en una vivienda modular de madera. La respuesta es que sí, mientras se cumpla la legislación vigente y se respete el código constructivo. “Son hipotecables y pueden tener cédula de habitabilidad para terreno urbano”, comenta Martín respecto a las unidades de Maestro Casas.
¿Cuánto tiempo se tarda en construir una casa de madera?
La ejecución completa de una vivienda prefabricada de Maestro Casas suele ser de seis meses, una vez el cliente tiene ya la parcela. Este tiempo contempla la obtención de licencia (la fase más lenta) y la construcción (la más ágil gracias a los avances tecnológicos de la prefabricación).
¿Se pueden reubicar?
En el mercado, existen opciones de casas móviles, pero no todas se pueden reubicar. Las viviendas de Maestro Casas sí que lo permiten. “Se puede, pero en el caso de las viviendas nórdicas se requiere un proceso de desmontaje y reinstalación. Históricamente, en España, hemos reubicado una Escuela de verano en la montaña de Madrid”, explica Martín.
¿Ha aumentado la demanda de este tipo de hogares?
En internet, las casas prefabricadas tienen un protagonismo innegable. Pero, ¿es fiel a la realidad? “Solo llevo siete años en el sector y he visto una evolución increíble de la demanda. Aun así, queda mucho por crecer, en el sentido de la construcción ecológica eficiente, para alcanzar a países centroeuropeos como Francia y Alemania”, comenta Martín.
¿Qué tipo de vivienda prefabricada se demanda?
Las viviendas más demandadas son unifamiliares de una planta entre 50 y 150 m2. En España, el cliente habitual es una mujer joven con ingresos estables, de entre 30 y 40 años, con familia, pareja o soltera, pero de personalidad independiente y con las ideas muy claras. Sobre todo, les gusta el interiorismo, la decoración y su proyecto de vivienda es un sueño vital por cumplir.
¿Cuál es la perspectiva de futuro de vuestra empresa?
Nos gustaría trabajar cada vez más directamente con el cliente particular y ofrecerle un servicio cada vez más completo, acercándonos al concepto llave en mano. Cada año damos un pequeño pasito en esta dirección y nuestro objetivo para el comienzo de 2023 es ofrecer a nuestros clientes particulares la licencia completa y también financiación.
¿Qué zonas tienen mayor demanda?
Las zonas más populares para la firma Maestro Casas son: Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid y Málaga, debido al volumen de extranjeros. A continuación, estaría la zona norte (Rioja, Salamanca, Segovia, Asturias…), por la mayor tradición de construcción por madera y por el mayor interés de los locales por pasar sus vacaciones en el campo y la montaña.
“Hay una tendencia creciente de las familias a dejar su piso en las grandes ciudades y mudarse a las poblaciones más pequeñas. Esperamos que esto continúe extendiéndose al resto de España, ya que también favorece a la construcción ecológica y, en consecuencia, se construye un mundo más saludable y en mayor conexión con la naturaleza”, revela Martín.
“Durante 2022, hemos reinvertido nuestro volumen de trabajo. Hemos pasado de tan solo un 30% de venta a particulares al principio de año a un 70% al final. Esta estadística incluye toda Europa y cada país tiene sus cualidades demográficas específicas, pero la tendencia hacia una vida más apacible en el campo está clara”, concluye.